Ir al contenido principal

AGUAS DE JAÉN


La gente peregrina hasta la pared del pantano del Guadalén para asistir al espectáculo que ofrece la fuerza del agua liberada por el ingenio de válvulas y compuertas. Una neblina húmeda y antigua se eleva hasta el pretil sobre el que se asoman las cabezas de las gentes tan poco acostumbradas a la generosidad de las lluvias. Hay un olor mineral y profundo. De maderas y limos conservados en las lodosas profundidades que ahora salen a la luz en una cascada horizontal. Una carcajada liquida en la que se desahoga y desagüa la pétrea pared y que sirve de marco a fotografías y vídeos que compiten en el mercadeo audiovisual. Rebrote y renacimiento de manantiales, fuentes y torrentes en el, tradicionalmente, reseco paisaje. Aguas arriba del embalse, en el remansado río que le da nombre, algunos árboles muertos hace lustros sirven de aislada percha a despistados cormoranes que dan buena cuanta de los peces que, aún más despistados que las enormes aves ante la súbita crecida de las aguas, se solean cerca de la superficie donde se convierten en pesca fácil. Aves y humanos que suelen rodnar con sus picos y sus cañas por las aguas guadalenitas
No muy lejos de este lugar el primo Guarrizas se pone bronco, de color rojo y ocre como las tierras que lo encauzan, en el Piélago antes de volverse loco y dejarse caer por los riscos de Aldeaquemada. La Cimbarra y sus Cimbarrillos desmelenados barranca abajo para asombro de propios y extraños que pasean por el arroyo Martín Pérez antes de que contraiga mojados esponsales con el Guarrizas, ya estas alturas de su vida, ahíto de vértigos. La Jaén lacustre y fluvial sorprende a poco que las borrascas se dejen caer valle arriba hasta toparse, por ejemplo, con el Guadalimar que se remansa en el lago artificial más grande de Jaén con permiso del patriarca serrano de El Tranco. El Giribaile. Un embalse vigilado por un poblado de diseño atlántido y de épico nombre,  Miraelrio. Cerca en los riscos de enfrente aún quedan en pie algunas cuevas de antiguo origen, la mayoría se hundieron sin remisión ante el peso del olvido y el paso del tiempo. Aún se sostiene una escalera tallada en piedra que sube hasta la meseta rocosa que atesora un subsuelo rico en yacimientos arqueológicos. Rocoso firme que se va aguzando hasta terminar en una proa con forma de castillo desde cuyas almenas se divisan las rojas lomas de Vilches o Arquillos y en años de sequía emerge el orgulloso puente de Ariza, sillares firmados por Vandelvira, para recordarles a los que mandan que siguen sin cumplir sus promesas de rescatar las históricas piedras y reubicarles en un lugar menos amenazado por las ovas y que deje de ser guarida de lucios, escondite de carpas y fuente de leyendas sobre ahogados y zona de juegos de ondinas y otras criaturas elementales.
Jaén de meandros y gaviotas en el Guadalbullón. Jaén de pozas y corrientes primarias. Jaén emergido con la belleza de la lluvia.

Comentarios

Entradas populares de este blog

CAGANÉ ESTREÑIDO

En Cataluña dicen que van a cambiar la Navidad por la fiesta de invierno y la Semana Santa por la fiesta de la primavera. Una consejo del Consejo Escolar de la región. Es decir que el popular "caganer" se quedará sin sitio para hacer sus deposiciones ya que en la fiesta de invierno no caben tampoco los belenes. La verdad es que cada día que amanece el número de tontos crece y no paran de buscar agujeros para meter la pata por decreto. Por el momento en los colegios de Jaén está permitido que los chavales se deseen felices Pascuas, pero si la ola catalana prospera de dificil manera se podrá casar ideologicamente la imagen de la alcaldesa socialista entregando, arrobada, su bastón de mando a la imagen de Nuestro Padre Jesús con esta mania de sustituir el crucifijo por una foto del presidente autonómico o a los reyes magos por un vejete con sobrepeso vestido de terciopelo rojo.

METER LA PATA HASTA EL CORVEJÓN

Lo de meter la pata hasta el corvejón es algo innato en el ser humano desde la mas remota antigüedad. De hecho si los animales tuvieran esa capacidad, que no la tiene todavía, dirían hemos metido la pierna.Quizás la primera gran metedura de pata de la historia fue la del “hombre antecesor” mientras caminaba por la sierra de Atapuerca, con tan mala fortuna que a meter la pata en la sima de los huesoso y o volvió a salir de allí hasta un millón de años después.Metió la pata también, Viriato, al elegir a sus colegas de farra guerrillera o al pagarles un sueldo tan esmirriado que en cuanto vieron brillar el oro romano tomaron las de VilladiegoY es que todos metemos la pata pero lo peor es que quede escrita en la historia por los siglos de los siglos y lo que era algo articular pasa al dominio público para que se publiquen libros y se hagan chascarrillos.Otro gallo le hubiera cantado a Dupont, mucho menos el de la cárcel de aquel castillo, si no hubiera metido la pata en Bailén, donde Casta

DIARIO DE UN CONFINADO II

A lo largo de las últimas semanas se está produciendo un fenómeno curioso. Basta con poner atención para percibir el latido vital de nuestros pueblos y ciudades. Abran sus balcones y ventanas y oirán lo que siempre pasaba y que no percibíamos. El encierro al que estamos sometidos los ciudadanos y a la parálisis obligada de sus herramientas y mecanismos está sacando al primer plano todos los ruidos que quedaban sepultados por la cacofónica actividad de nuestras rutinas diarias. El trino de los pájaros es una de las voces principales y las conversaciones de nuestros vecinos, con un poco de atención, se vuelven inteligibles y nos damos que las nuestras también pueden ser oídos por el resto de nuestro barrio. El silencio de los primeros días de confinamiento nos había atronado los oídos y estos, poco a poco, van sacándoles los matices a esa irreal banda sonora que por primera vez escuchamos. Estamos en momentos de muchas primeras veces. Estamos estrenando sensaciones que teníamos aga